Los únicos privilegiados: ¿son los niños?

“Vamos a llevar el peronismo al alma del niño argentino, pues nos reservamos el derecho de que la niñez argentina aprenda a amar a la Patria y a Perón desde su cuna. El cebollita porteño, el coyita de Jujuy, los changuitos y todos los niños del país, antes de decir papá, deben aprender a decir Perón”[1] ordenó Eva en una de las arengas más miserables que se registren en su haber. Y así se hizo. Durante la dictadura de Perón en los textos de las escuelas primarias, lo primero que los educandos aprendían a deletrear era la oración “Perón es el líder. El líder nos ama. ¡Viva Perón!. Perón es un buen gobernante. Manda y ordena con firmeza. El líder nos ama a todos. ¡Viva el líder!”. O este otro libro de cabecera de instrucción primaria, conteniendo 80 páginas de las cuales Perón ocupaba 15, Eva 35, San Martín, Belgrano y Sarmiento una cada uno y en donde la oración probablemente más chocante era “Mamá y papá me aman. Perón y Evita nos aman. Mi hermanita y yo amamos a mamá, papá, Perón y Evita”[2].

Los alumnos más pequeños debían leer páginas que decían; Perón. Pe-rón. Eva. E-vi-ta. Evita mira a la nena. El nene mira a Evita; Vi a Eva. Ave. Uva. Viva. Vivo. Veo. Vía. Eva. E-va. Evita. E-vi-ta. Perón. Pe-rón. Sara y su esposo son peronistas. Votaron a Perón. Esa dama es Evita (dibujo). Era tierna y dadivosa. Dio su ayuda a todos. Nadie la olvidará. Perón nos dio y nos dará más. El Libertador General San Martín (dibujo). El Libertador General Perón (dibujo); Gloriosa casa de Tucumán (dibujo). En ella se juró el 9 de julio de 1816 la independencia política. El 9 de julio de 1947 la independencia económica. Nuestra gratitud a los patriotas de 1816 y 1947. Día de los Trabajadores. Primero de Mayo. Fiesta del Trabajo. Los trabajadores argentinos festejan en ese día los triunfos obtenidos durante el gobierno del general Perón; Perón nos ama (dibujo). Nos ama a todos. Por eso lo amamos. ¡Viva Perón! Ésta es Evita (dibujo). ¡Nos amó tanto! El general Perón es el genial gobernante de la nueva Argentina (dibujo). Sus tareas comienzan al amanecer y no terminan hasta la noche; Evita ama a los nenes. Los nenes y las nenas aman a Eva. ¡Viva Evita!¡Viva! ¡Viva! ¡Perón es el líder! (dibujo) ¡Viva! ¡Viva la bandera argentina! (dibujo) ¡Viva el general Perón! (dibujo) (…) Perón, como San Martín es, para sus partidarios, insustituible y para sus enemigos un luchador incansable y victorioso (dibujos ambos)[3].

Las ilustraciones que representaban a Eva solían graficarla como un hada madrina. Para intensificar la propaganda infantil, el régimen editaba una publicación llamada Mundo Peronista, la cual instigaba a los niños a rezar de rodillas la siguiente plegaria: “!Señor! Tú eres el único que ve las intenciones. A ti no se te puede engañar con discursos. Tú sabes que el general Perón es bueno y que Evita es buena. Si no lo fueran, en vez de pensar en nosotros, en los pobres, hubieran pensado para los ricos para apoyarse en ellos”[4].

Como todo este repugnante espectáculo era de público conocimiento, con el tiempo los defensores del dictador Perón alegaron que esto era “obra de los alcahuetes” pero que Perón “jamás aprobaba” estas patéticas advocaciones. Va de suyo que Perón era amo y señor de la vida de los argentinos y nada se hacía sin su anuencia, pero además este carnaval laudatorio no era sólo avalado con su permiso sino con su deliberada y expresa directiva: “Nosotros tenemos en este momento cuatro a cinco millones de estudiantes, de gente que estudia. Que si no votan hoy, votan mañana, no hay que olvidarse. Tenemos que irlos convenciendo desde que van a la escuela primaria. Y yo les agradezco mucho a las madres que les enseñan a decir Perón antes que decir papá. Es demasiado eso, pero….Es decir para la primera parte de esta acción individual es imprescindible el adoctrinamiento. La escuela primaria constituye entonces el primer escalón de captación y del adoctrinamiento de la futura ciudadanía al movimiento justicialista. Esta exigencia impone al personal de preceptores, maestros y profesores una profunda identificación con los postulados de la doctrina, a fin de lograr que la juventud, al iniciarse en el ejercicio de los derechos ciudadanos se encuentre identificada con la doctrina nacional”[5]. Eva por su parte encaró esa tarea adoctrinadora arengando a sus descamisadas de esta manera: “Y nosotras, mi general en lo íntimo de nuestro corazón de mujeres argentinas, peronistas, sabemos la responsabilidad que nos toca en esta hora histórica vivir. Y ya estamos, en nuestros ejércitos civiles de mujeres, adiestradas y adoctrinadas para enseñarle e inculcarle al niño que el alma de la Patria, antes que las escuelas, lo forman las madres argentinas en la cuna, que les enseñamos a quererlo a Perón antes que a bendecir a los nombres propios”[6].

Por supuesto que todo este despreciable espectáculo con el que se manipulaba a los menores de manera institucionalizada era lo menos grave que se le podía adjudicar a Perón en la materia, puesto que lo especialmente repugnante y reprochable por entonces fueron la actividades abusadoras y estupradoras que el dictador mantenía con nenas menores de edad con las que el jugaba (fundamentalmente tras la muerte de Eva), tal el caso de Nelly Rivas, quien pernoctaba en la Quinta de Olivos con él cuando esta tenía 14 años y Perón 60: “Sería una gran falsedad no reconocer que cada una de nosotras quería ser una segunda Evita. Con la edad que ya teníamos, él alimentaba nuestro romanticismo y nuestras agitaciones corporales”[7] sostuve Rivas, agregando que “Después de esa primera noche yo me instalaba en el dormitorio del general (…) hacía ya tiempo que me sentía su mujer. Él me trataba como tal ¿y alguien piensa que yo no asumía esa condición?” [8].

Queda claro y documentado y así lo hemos expuesto en nuestro libro “Perón el fetiche de las masas”: durante la dictadura de Perón, los niños no fueron precisamente los privilegiados…

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[1] GAMBINI, HUGO: “Historia del peronismo, el poder total” (1943-1951). Ediciones B Argentina, Tomo 1, año 2007,pág. 262.

[2] ARENA, LUIS: “Alelí”. Editorial Ángel Estrada; Bs.As,1953. (Colección Jorge Irazu).

[3] Ver: Gambini, Hugo. “Historias del Peronismo (La obsecuencia-1952-1955)”. Ediciones B Argentina S.A.,  2007, págs. 190, 191.

[4] Citado en: Hugo Gambini, “Historia del peronismo, el poder total (1943-1951)”. Ediciones B, Argentina; Tomo 1, año 2007, pág.195.

[5] Ver filme “Permiso para pensar”. Disponible en el Archivo General de la Nación o en internet a través del siguiente link: http://www.youtube.com/watch?v=CrOQS1KBmt8
[6] Ver filme “Permiso para pensar”. Disponible en el Archivo General de la Nación o en internet a través del siguiente link: http://www.youtube.com/watch?v=CrOQS1KBmt8
[7] Ella tenía 14, él 60: el testimonio de la joven que fue amante de Perón. Después de Evita, Perón convivió con una adolescente. Un libro cuenta que la chica se fue a vivir con Perón. Dormía en el cuarto de Evita. El la llamaba “nenita”. 2, 11, 2014. Diario Clarín.http://www.clarin.com/cultura/Evita-Peron-Nelly-amante-adolescente_0_1240676363.html
[8] Ella tenía 14, él 60: el testimonio de la joven que fue amante de Perón. Después de Evita, Perón convivió con una adolescente. Un libro cuenta que la chica se fue a vivir con Perón. Dormía en el cuarto de Evita. El la llamaba “nenita”. 2, 11, 2014. Diario Clarín.http://www.clarin.com/cultura/Evita-Peron-Nelly-amante-adolescente_0_1240676363.html

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